La negligencia de un médico, que no tuvo la paciencia de examinar y tratar como se debe a un bebé de tres meses de nacido, casi le provoca la muerte al dejarlo con una pila de reloj, que el infante se tragó en un descuido de su madre.
El pequeño metal ocasionó daños severos en el esófago del menor, por lo que fue evacuado de su natal Chiclayo al Instituto de Salud del Niño, donde recibe un cuidado especial con sondas.
Le reconstruirán el esófago y tendrá que llevar un tratamiento para que recupere peso. Además, está deshidratado.
La desesperada madre, Lindomira Sánchez Sempértegui, llevó de urgencia a su pequeño Gonzalo D.S. (3 meses) al referido centro de salud para que le extraigan el metal, pero el médico se limitó a decirle que no tenía nada y simplemente le recetó unas gotas para los cólicos, contó.
"Nosotros confiamos en ese médico. Días después mi bebé se puso mal y lo llevamos al Hospital Las Mercedes de Chiclayo. Allí un doctor le mete un tubito por la boca, aspira y saca la pila. Así de sencillo fue la intervención, pero mi hijo ya tenía graves problemas en el esófago generados por la pila", añadió.
La familia es humilde y requiere ayuda con pañales medicinas o un empleo para la madre. Contactarse al celular 979515-390.
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