Han pasado seis meses desde entonces, no guarda
odios, sin embargo, pide justicia y un castigo El 5 de noviembre del
2008, Kínder ingresó al quirófano para someterse a una operación de
abdominoplastía. Se puso en manos de Armando Monar, médico asimilado de la Policía Nacional,
quien acambio de 2 mil dólares prometió a la bailarina dejarla con un
vientre plano y medidas perfectas. Pero los resultados fueron adversos.